Bertsolarismo
Una de las peculiaridades más destacables de la cultura y la literatura oral vascas es, sin duda alguna, el bertsolarismo.
El bertsolari improvisa versos cantados, debiendo respetar siempre tanto la melodía como la rima, así como el tema prefijado.
Esta tradición –al borde de la desaparición en numerosos lugares– cuenta en el País Vasco con gran arraigo y popularidad, especialmente en determinados lugares y situaciones: sidrerías, fiestas populares...
La fama de los grandes bertsolaris supera entre los vascos a la de los artistas de cualquier otro ámbito: los nombres de los más afamados perviven durante siglos en la memoria de las gentes.
A comienzos del siglo XX comenzaron a organizarse los campeonatos de bertsolarismo; a finales de este mismo siglo se crearon las escuelas de bertsolaris.
La nueva generación de jóvenes bertsolaris ha elevado la calidad de este arte hasta cotas nunca alcanzadas en el pasado y ha cosechado éxitos abrumadores.